Mensaje presentado a la Asamblea Nacional por el honorable Presidente de la República Gral. Rafael L. Trujillo Molina el 27 de febrero de 1932 en que da cuenta de su gestión oficial durante el año 1931

Abstract

Comparezco ante vosotros para cumplir el imperativo deber constitucional de daros cuenta de mis actos durante el tiempo que llevo al frente de la Administración Pública. Debo dirijiros ante todo mi palabra de agradecimiento ya que en el más culminante momento de estos agitadísimos seis meses de gobierno que han transcurrido desde que comparecí ante vosotros para jurar “por Dios y por la Patria” el cumplimiento de mis deberes constitucionales, hubisteis de otorgarme todos los poderes de que estáis investidos, con lo cual a la vez que comprometisteis mi responsabilidad, obligasteis mi gratitud y mi respeto. De aquellas facultades extraordinarias que tuvisteis a bien atribuirme creo haber hecho uso útil y dicreto; pero como bien puede ser que a pesar del empeño con que quise hacerme una vez más acreedor a vuestra confianza; a pesar del celo personal que puse en el cumplimiento de los más ligeros detalles del Gobierno en aquellos días de amargas desventuras; a pesar de la aprobación unánime que impartisteis a los actos por mí realizados en aquella memorable ocasión, tuvieseis vosotros alguna objeción que hacer a la labor gubernamental que realicé al amparo de vuestra confianza, he querido iniciar este mensaje ofreciéndoos, Señores Representantes, una nueva oportunidad para rectificar señalando los errores en que haya podido incurrir o ratificar, en el caso contrario, manteniéndome el apoyo de vuestra decidida y leal cooperación.