Abstract:
He llevado en mi alma un anhelo, un anhelo vehemente; anhelo que ha golpeado mi pecho,
persistentemente, durante años. Ese ahhelo, por momentos, se hizo irrefrenable, agotaba mis fuerzas y agotaba mi voluntad» lo sé como puede resistir por tanto tiempo. Muchas veces me consideré culpable por no dar paso a ese vehemente anhelo. Hoy, por fin, llega la hora de que brote del pecho el anhelo irrefrenable que agotó mi voluntad y puso exhaustas mis fuerzas. Ese anhelo ha sido, el de dialogar. con el noble y sufrido pueblo dominicano. Poderlo realizar hoy, me colma de íntima fruición de espíritu. Al fin aquí estoy frente a Uds. para decirles mi verdad. Creo entender que es la verdad del pueblo que me escucha. De mis labios no brotará una sola palabra que no sea expresión leal de mis sentimientos, diáfana revelación de mi propio corazón.