Abstract:
Las grandiosas obras realizadas en el Gobierno del Generalísimo y Doctor Rafael Leónidas Trujillo Molina, Benefactor de la Patria y Pad re de la Patria Nueva, no tienen paralelo en
la historia. Sin hacer empréstitos, y sin afectar la economía nacional, dándose el caso en esta Gloriosa Era que en vez de descender el presupuesto ante la magnitud, cualitativa y cuantiosidad de estas obras se aum ente en sumas asombrosas. Los dirigentes de antaño fueron hombres sin escrúpulos, cuya finalidad al posesionarse del Poder, era saciar su apetito devorador am parado del Presupuesto del Estado. No podía haber estabilidad, porque faltaba un hombre de verdadero concepto. A sí vim os que desde 1844 hasta el 1930, cuando apareció el Mesías que iba a restaurar la Patria, el Jefe por Excelencia, Generalísimo Trujillo, el estamento del estado era un mito. No existía discernimiento, y se ignoraba el verdadero sentido que hiciera factible el aspecto organizado que debe haber en todo gobierno. Ambulábamos sin ningunas miras y éramos completamente desconocido com o pueblo en todos los órdenes, y si acaso llegaba algún reflejo de nosotros ante la faz del mundo era para señalarnos com o revolucionarios.