Mensajes y paliques de cometón

Abstract

Por la gracia de Dios, [a voluntad del pueblo y la Constitución del Casino Central, Reina del Carnaval, a sus súbditos, Vasallos: Ha sido la voluntad de mi pueblo y yo la acato; por eso he consentido en colocar sobre mi cabeza la corona de reina; pero yo os declaro que hubiera preferido mejor lucir en estas fiestas engorro frigio, emblema de la democracia y de la libertad, y en lugar de vasallos haberos podido nombrar conciudadanos. Por eso yo os invito desde ahora para que, cuando termine mi efímero reinado, me acompañéis a dar, como daré yo con todas las fuerzas de mi alma, un estruendoso viva a la República.! Por eso es también que mi cetro no será látigo que al estallar en el aire os infunda pavor, sino una caña de lirios que al sacudirla suavemente os deje un agradable perfume en el alma. La vida es un erial: tristezas, desengaños, penas y temores forman su urdimbre. Por cada rosa, hai mil espinas; a cada paso que avanzamos en el ideal, cien punzadas. Forja la fantasia una quimera, y cuando se sube a su torre de marfil a cantar victoria, sopla la realidad su viento formidable y echa por tierra la maravilla.