Resumen:
Salí de cusa. Partí para mi casa. La esposa y los hijos quedaban; e iba para donde la viejecita que yo quisiera ver hora por hora, y rendir culto a San Demetrio, Patrono de mi pueblo nativo. De donde partí tomé mi alforja que completé con unos cuantos libros, algo del paisaje y de lo recóndito de adentro. Estampas de unos años en que la mano de un hombre dejó las ruinas limpias y levantó las grandes cosas nuevas que he visto crecer en la tierra de mis hijos, aquí donde hice hogar y volví a hacer Patria.