Tributo de admiración : una mujer dominicana al jefe ilustre Generalísimo Rafael L. Trujillo Molina

Abstract

En ninguna época de la historia del pueblo dominicano, se había identificado la mayoría de sus habitantes, con el hombre que les dirige, como en la actual, EN QUE UN HOMBRE ADQUIERE LAS CUALIDADES DE ENCARNAR TODOS LOS IDEALES Y VIRTUDES DE LA REPUBLICA. Debido a esa identificación, los que antes no participaban en ninguna manifestación de la vida pública, son ahora parte integrante de las actividades nacionales. Es así como la mujer dominicana reconociendo LAS CUALIDADES ELEVADAS DEL MAXIMO DIRECTOR DE LA PATRIA, SACUDE EL POLVO MILENARIO DE SU INACTIVIDAD, Y RECONOCIDA Y LLENA DE FERVOROSA GRATITUD EXALTA LAS VIRTUDES UNICAS DE UN HOMBRE QUE LES HA SIDO DEFENSA Y ESCUDO. Si la mujer dominicana callare, se haría reo de ingratitud; que callar en el instante en que hemos encontrado QUIEN FUE ENCARNA NUESTROS IDEALES, ES CRIMEN.