Resumen:
Salomé Ureña, la más insigne de nuestras poetisas, descendía de dos familias dominicanas muy antiguas: la familia Ureña y la familia Díaz. Ambas eran familias empobrecidas a causa de las vicisitudes de la Isla de Santo Domingo. Todos los antecesores de Salomé que se recuerdan eran dominicanos, excepto unos que vinieron de Canarias en el siglo XVIII. Quizás los Ureña procedían de Santiago de los Caballeros, donde todavía es muy común el apellido.