Resumen:
Queridos hermanos que acabáis de ser iniciados:
Entre vosotros tengo varios hijos espirituales y uno que lleva mi sangre y mi nombre. Y así no he podido sustraerme al impulsivo anhelo de deciros dos palabras, fuera del ritual, com o si fuesen el abrazo espiritual conque os acojo bajo estas bóvedas ilustres, en nombre de
nuestra madre Logia la Cuna de América No. 2.