Resumen:
AL cumplirse el primer aniversario de la infortunada epopeya de liberación dominicana, de Luperón, el recuerdo de Federico Horacio Henríquez Vázquez (Gugu Henríquez), y de sus compañeros muertos en aquella empresa —tan breve como trágicamente heroica—: cobra una viva vigencia y un extraordinario símbolo, a la vez que obliga, mucho más aún, con el ideal, tan humano y americano, a cuya realización no vacilaron en ofrendar sus vidas: Salvador Reyes Valdés, BCugo Kunhart, Alfonso Leyton, Alberto Ramírez, Alejandro
Selva, Manuel Calderón, y Federico Horacio Henríquez Vázquez;. Los pueblos no olvidan y la historia dice su final justicia. Para que el pueblo dominicano, y los demás pueblos de América, tengan siempre delante lo que fué y lo que sigue significando el sacrificio
de Luperón; para que la historia tenga nuevos documentos y mayores resonancias humanas —para mejor juzgar— se anticipan, en este folleto, elementos de juicio histórico y ecos humanos, motivados por la vida ejemplar de un gran joven héroe dominicano, que nunca supo traicionar a su tiempo, a la democracia mundial, a su patria, ni a su ideal.