Resumen:
Nadie que no sea Juan Pablo Duarte tiene derecho a representar la Masonería Dominicana. Nadie que no sea él puede presentarse ante el mundo como arquetipo del masón dominicano. No hay entre nuestros masones quien lo aventaje en perfección moral ni en grandeza de alma. Es la piedra cúbica de nuestra Masonería, y aunque fué débil de cuerpo, su alma tuvo la fuerza y la estabilidad necesarias para fundar nuestra Patria y encamar nuestra Masonería.
Enrique Patín.