Resumen:
La fundación de este Ateneo, no hace todavía un año, respondió a una necesidad hondamente sentida y a un anhelo persistentemente revelado en el seno de la sociedad de Santiago de Cuba. Diversas tentativas fracasadas,—que no infructuosas, porque dejaron su huella saludable,—habían precedido a este empeño victorioso. La más importante y digna de mención fué la organización de aquella Sociedad Conferencias que fue iniciativa de los doctores Ricardo Eguilior y Urbano Somodevilla y que tuvo como primer Director al primer Presidente de nuestro Ateneo, al Ledo. Eduardo González
Manet. Varios actos públicos celebró dicha sociedad.