Mensaje que al Honorable Congreso Nacional presenta el ciudadano Presidente de la República de su ejercicio administrativo durante el año 1926

Abstract

Vengo a cumplir el precepto constitucional que me impone la obligación de rendir al Honorable Congreso Nacional en este día de regocijo patrio, el resultado de la labor realizada por la Administración Pública durante el ejercicio del año anterior. Al cumplir este alto encargo, me congratulo declarando que el éxito de la labor a mí encomendada se debe en gran parte a la incondicional devoción que ha prevalecido en este Alto Cuerpo para todo lo que redunde en provecho de la felicidad del pueblo dominicano y que lo ha determinado a prestarle una cooperación decidida a las iniciativas del Poder Ejecutivo tendientes a esa finalidad. He consagrado mi atención principalmente a aquellas cuestiones de vital importancia para la prosperidad del país y para asegurar un porvenir lleno de lisonjeras esperanzas para nuestra nacionalidad. Así las que se refieren al mantenimiento de la paz pública, bien del cual estamos disfrutando desde hace varios años y que se ha afianzado firmemente desde que el voto de las mayorías nacionales puso sobre mis hombros la responsabilidad del poder; las que se contraen al desarrollo de las relaciones internacionales, poniendo en ello el mayor cuidado a fin de que fuesen dirijidas dentro de una norma de respeto y cordialidad favorable a la posición que ocupamos; las que están ligadas al desarrollo de nuestras riquezas y a las facilidades de intercambio de las mismas; las que afectan una escrupulosa organización y administración de la Hacienda Pública; y las demás necesarias para propender al mejoramiento de la salud del pueblo y al desarrollo de su cultura espiritual.