Resumen:
Cumpliendo con el deber que me impone la Constitución del Estado, tengo el honor de presentar a Vuestra Excelencia la Memoria anual contentiva de la labor realizada por la Secretaría de Estado bajo mi dirección, durante el pasado año de 1928. Es con verdadero placer que hoy rindo acatamiento a tan indeclinable mandato, toda vez que el feliz desenvolvimiento de la administración pública en sus diversos aspectos, bajo el amparo de una democracia ejemplar, constituye un legítimo timbre, de orgullo para el Gobierno de Vuestra Excelencia, inspirado siempre en el libre funcionamiento de las instituciones y en el
progreso moral y material de la Nación.