Discurso pronunciado por el M. Y. canónigo M. de J. González

Abstract

El culto grupo de damas, bajo cuya diligencia y actividad fué encomendada la organización solemne de las fiestas del día de las Madres, me ha designado para llenar este turno del precioso programa que ha de regir en la celebración de esta solemnidad. Y a decir verdad, si me hubiera sido posible excusarme en esta árdua tarea, me hubiera valido de todos los medios para no asumir la enorme responsabilidad de someter a prueba una vez más, mi humilde palabra, que no sólo de suya ha sido siempre débil, sino porque siento en mi ser ya muy próximo, el desfallecimiento de mis años.