Resumen:
El movimiento turístico en nuestro país es uno de los muchos aspectos que con marcada efectividad caracterizan la gran política evolutiva, desarrollada gracias a los nuevos sistemas de convivencia social y de relaciones externas implantados por el Generalísimo Trujillo durante los últimos ocho años transcurridos. Cuando ese gran conductor asumió la Dirección del Poder Público, en 1930, el turismo era considerado aquí, todavía, como algo innecesario, de ninguna o muy escasa importancia, no obstante ser ya, para esa fecha, una fuente de apreciables y seguros ingresos en muchos países europeos y americanos.