Resumen:
LA MEDIANOCHE era por filo, cuando Joergensen, poeta al cabo, tocaba los umbrales de la plaza de San Pedro, en su ronda solitaria por la Roma nocturna. “El triunfo de la belleza arquitectónica” como ha sido llamada con justicia, a la Basílica, lanzaba la silueta de su elegante y gallarda crestería contra el obscuro azul del cielo. El Palacio Vaticano también dormía. Solo en una ventana se advertía luz.
Descripción:
Esta conferencia fue dictada por el autor en el Ateneo Dominicano, a raíz de la muerte de Pío XI presidiendo el acto S. Excia. Mons. Ricardo Pittini.
Perteneció a la biblioteca personal de Martínez Boog.