Resumen:
Hagamos en nuestro pequeño pero bello país, cada día, más fuerte y más intenso, el poder de la ciencia, esparciendo su luz vivificante y divina en los cerebros de la potente juventud que se levanta, para disipar de ellos la ignorancia, causa eficiente de la degradación humana. Fundemos Institutos, Escuelas y Periódicos, y levantemos Tribunas para señalar á nuestro pueblo su augusto destino, así, en vez de gastar sus vitales energías en estériles é infecundas luchas, que se engrandezca su espíritu en las dulces y benéficas conquistas del saber.
MANUEL E. ARAUJO.