Resumen:
Emocionada con el gran acontecimiento que ha conmovido el corazón dominicano con la sublime decisión que ha adoptado el Excelentísimo Dr. Rafael Leónidas Trujillo Molina, de donar a la ciudad de Higüey una Basílica en honor de la Santísima Virgen de la Altagracia, Madre y Señora Nuestra, la que en su seno purísimo encarnó el verbo divino bajo la custodia augusta del Patriarca San José, como un homenaje de gratitud a nuestro Ilustre Jefe, dedico estos gratísimos momentos de expansión espiritual para expresarle una vez más, mi sincera y afectuosa simpatía por esta nueva prueba de interés en pro del mejoramiento cristiano y con santa devoción despertando el ferviente amor en el alma de todos los dominicanos.