Resumen:
El papel es uno de los materiales con más presencia en museos, bibliotecas y archivos, dado que gran parte de la producción artística e histórica ha sido realizada en ese soporte.
Curiosamente, para mantener la integridad de estos papeles patrimoniales, los conservadores necesitan recurrir a otros papeles: desde láminas muy delgadas para reparaciones casi imperceptibles en libros, documentos y obras de arte, a sólidos cartones para la confección de sus encuadernaciones, cajas y enmarcados. El mercado especializado ofrece variedades adecuadas para cada necesidad, pero para su selección es imprescindible conocer las propiedades que los diferencian, y también las características de los papeles a los que se aplicarán...