Resumen:
Me encontraba frente a la epata donde el Mediterráneo hace sus lánguidos esfuerzos por inundar la tierra; en la inolvidable, culta, alegre, risueña y acogedora Ciudad de Beiruth,
capital del hermoso y legendario Líbano, cumpliendo allí con honestidad y eficiencia como lo he hecho siempre, mis deberes de representante de la República. Por los canales de Radio Caribe, emisora con la cual permanentemente se encontraba sintonizado mi Radio-receptor, llegó la nueva inesperada: TRUJILLO HABIA DEJADO DE EXISTIR...