Resumen:
AL LECTOR
No recordamos si fue Tucídides, el más grande de los historiadores griegos, o Tito Livio, el patricio ardiente y de elegante estilo, quien dijo: “La historia tiene los labios y el corazón de bronce”. Lo que si recordamos con precisión, fue lo que dijo el integro y honorable
Cayo Suetonio Tranquilo, el secretario particular del estético y morboso emperador Adriano, a su amigo Plinto el joven, en elegante epístola, cuando éste lo elogió y lo reconvino a la vez, por su Historia de los “Doce Césares”: “Clío es una musa fría y exacta como un cálculo matemático, e inexorable como un cadalso”. Por eso, no encontrarás en estas páginas autopsias ni disecciones. Este es un libro de anécdotas jocundas, de sonrisas y de risas, de los dos hombres más notables del año tempestuoso y mandibulares de 1881, en la República Dominicana. Donde la sangre de la guerra fratricida, de las hecatombes humanas y de los patíbulos, llegó hasta las cinchas y frenos de los caballos de guerra, inundando, sacrílegamente, los cristianos y pacíficos cementerios.
Descripción:
Dedicado este libro al Generalísimo Trujillo, porque como el águila caudal de las orillas del
Rubicón: Vino, Vio, lo Venció todo y a todas. No hay verdad mas inconclusa profundamente leal y sincera.
V. D.
Perteneció a la Colección "Martínez Boog".